En la ternera, no todo es chuletón y solomillo. Aunque parezca mentira, y como nos recuerda la Guía Repsol, después de quitar esos dos cortes queda un 86% más de piezas que esconden algunos de los platos más sabrosos.
Una de ellas, la croca (como llamamos aquí a la cadera): una de las piezas más conocidas para cocciones muy cortas. Admite tanto carnes crudas como marinadas o parrilla.
En O Largo os la ofrecemos en su punto, ni muy hecha, ni poco hecha, un lugar de cocción exacto que sólo otorgan las brasas de nuestra parrilla. En ella, las piezas se someten a fuego lento alcanzado el gusto de nuestros clientes. ¿A qué estás esperando para venir a disfrutarla?